Cada vez que se me asigna la tarea de escribir las palabras me ubico frente a esta
página en blanco y lo único que mi mente dicta es GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS. Una y
mil veces GRACIAS querido público por asistir.
Parece increíble que ya estemos próximos a cumplir tres años de estar manejando
este teatro y seamos sinceros, por más fortaleza que uno tenga cuando arranca un
proyecto, hay momentos de flaqueza más cuando los comentarios alrededor no son
los mejores y cuando uno mismo ha insertado en su disco duro vocabulario como
“esta ciudad es muy difícil”, “aquí no hay teatro”, “la gente no se entera”, “no hay
apoyo” en fin, palabras que usted también acostumbra a escuchar en la profesión que
realiza porque en Miami nadie está exento del pesimismo. Pero que satisfacción da
cuando se van rompiendo estos estereotipos y te das cuenta que la fórmula ya está
inventada y solo tienes que practicarla: trabajar con constancia, mucha dedicación y
estar alerta siendo crítico de tus mismas acciones para corregir y continuar sin
desfallecer.
Me preguntan constantemente sobre a que se debe el éxito de El Cavernícola, y estoy
segura que en este montaje converge la fórmula que antes mencioné acompañado del
talento inigualable de Alexis Valdés, una producción sería, comprometida más el
impulso de un espacio en constante movimiento.
De nuevo GRACIAS, gracias a usted que es la razón fundamental de nuestro trabajo, a
usted que entre las muchas actividades diarias y algunas excusas para evitar salir de
casa nos eligió para regalarle a su espíritu un rato de esparcimiento, a usted que con la
compra de su boleto permite que todo el engranaje de esta empresa dedicada al
entretenimiento siga en desarrollo.
Usted ya hizo su parte, ahora permítanos hacer la nuestra:
Relájese y disfrute la función.
Marisol Correa
Directora